"Cuando era niño, mi padre se rasuraba su bigote. Pero era inmediatamente ordenado a dejarse crecer de nuevo por mi horrorizada madre.
Honestamente, se veía terrible, el es del tipo de, papá bigotón. Décadas después, yo experimenté un episodio medianamente psicótico cuando me rasuré mi propia barba, la misma que había sido parte de mi personalidad", manifiesta Amit, un israelita de 44 años.Pero este pana, lleva este caso aún mas allá en este comercial para las razuradoras Blade, cuando se razura su barba luego de dejársela crecer por 14 años.
Sus niños nunca lo han visto sin ella, y obviamente, a pasado mucho tiempo desde que su papá, mamá y esposa lo han visto afeitado.
Naturalmente, el está un poco preocupado. Mire el video y véa que pasa cuando el decide ponerse la "soga al cuello". Será suficiente para hacerlo llorar, lágrimas de hombre barbudo por supuesto.