A eso de las 6:30 de la tarde del día de hoy, en el sector del Terminal Terrestre del cantón Limón Indanza, patio de comidas, los gritos desesperados de una niña y su madre llaman la atención de los comensales allí reunidos.
La rápida acción del señor Castillo, conocido cariñosamente en Limón como "el pato" o "penko", permitirá que la hermosa joven de la derecha siga viviendo
"Por favor llamen una ambulancia", imploran ante el desconcierto de los ciudadanos.
Quien mas se alarma y deja de preparar comidas en su local de asados, es Antonio Castillo Suarez, quien sufre descapacidad motríz en su pierna izquierda por efectos de la poliomielitis adquirida en su niñez. Esto no impide que rápido cruce la calle ayudado de su muleta y se dirija al lugar en el cual pedían auxilio.
Allí, se entera que una hermosa joven de 17 años, alumna de un colegio de la localidad, había ingerido alguna substáncia tóxica y ya estaba inconsciente. Pidió ayuda a un comensal suyo que esperaba el bus, y el señor gustosamente lo ayudo a embarcar a la joven al hospital.
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Antonio, mas conocido como el "pato" o "penko", nos comenta algo molesto de que su esposa ya había llamado a la ambulancia; pero, nos dice que que esta nunca hizo presencia por que decidieron embarcarla en su camioneta, junto a la madre y mas familiares de la chica.
El estado de la joven en estos momentos, comenta la doctora a Radio Limón, es estable y hay certeza de que mejorará, aunque nos dice de que las evaluaciones se la hacen a cada momento, pues el líquido autoingerido es muy tóxico.
La estudiante ya había posteado su estado anímico desde ayer en su cuenta personal de la red social Facebook, en la que advierte a sus contactos que ella morirá y otro, pidiendo que vayan al hospital; a lo cual, sus amigos lo toman como broma. Profesionales en sicología recomiendan que cuando una persona hace esta clase de anuncios, se los tomen en serio.
Penko llega a visitarla al hospital y le comentamos las buenas nuevas: "salvaste una vida, le decimos" y el está feliz, nos dice que sería la segunda vida que el salva, pues años atrás, salvó la vida de la hija del entonces concejal Martinez, quien flotaba inerte en la piscina municipal.
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